El jueves 20 de enero se realizó la primera salida del año que forma parte del entrenamiento de aguas abiertas.
Partimos como siempre desde el muelle del puerto de Núñez, en la lancha del club para nadar río adentro.
Nos embarcamos rumbo norte acompañados por un gomón de apoyo y un guardavidas.
Fue una tarde nublada y ventosa con una temperatura agradable para nadar, pero las condiciones no eran las más óptimas, ya que los vientos del sudeste producen gran oleaje, un desafío un poco más estresante para los debutantes. Aún así, nos permitió nadar del barco a la boya, en su mayoría una vez y para los más experimentados, que buscan un poco de acción y adrenalina, 1 y 2 veces más.
Fue clave la charla inicial a cargo de Guille Miranda, ex y gran Capitán de Natación.
En las salidas al río, se aprende a nadar con corriente, a favor, en contra y de lado, a mantener el rumbo a pesar del oleaje y tratando de no perder la visión del objetivo, cosa poco fácil mirando a 5 centímetros al ras del agua. Es una experiencia completamente diferente a la natación de pileta, de un contacto con la naturaleza extremo y sobre todo, los días de viento y olas, es más parecido a navegar que nadar, solo que el impulso es a sangre y brazos.
Es fundamental que quienes acudan al Desafío Catedral 2022, tengan al menos una experiencia de aguas abiertas.
Comentario aparte merecen los iniciados que metieron garra a un río bravo ¡Felicitaciones a cada uno por su desempeño! ¡Vamos por más!
Cualquiera que quiera debutar nadando en el río no lo dude, y póngase en contacto con la Capitanía (natacion@cuba.org.ar) . Es una gran experiencia y será acompañado en todo momento por nadadores, guardavidas y gomón de apoyo.